El Mansueto, junto con Santa Bárbara y el sector del Cementerio, eran las posiciones defensivas más próximas a la ciudad, posiciones discontinuas que se servían del dominio que tenían sobre los territorios circundantes. La larga permanencia en aquellas posiciones las había dotado de un grado de fortificación aceptable, y la proximidad a la ciudad hacía más llevadera la vida de sus moradores. En la parte posterior, dando vistas al actual barrio de la Fuenfresca se habían instalado en una antigua paridera las cocinas y otros servicios.

Frente a ellas, en la zona de Valdecebro, se había situado a finales de 1936 la 22 Brigada Mixta, mandada por Francisco Galán, teniente retirado de la Guardia Civil y hermano del héroe republicano de la sublevación de Jaca, Fermín Galán. Esta brigada participaría en el fallido ataque sobre Teruel en diciembre de 1936, siendo herido su jefe en el curso de estas operaciones.

En diciembre de 1937, El Mansueto y las lomas del Cementerio serían las posiciones que más resistencia ofrecerían a los republicanos, que terminó con el repliegue de sus defensores el día 22 de ese mismo mes. La defensa de estas posiciones estaba a cargo de uno de los batallones del Regimiento de Infantería Gerona 18, que formaban parte de la 1ª Brigada, 52 División, al mando del Coronel Barba.

Replegada la guarnición sobre los reductos defensivos del interior de la ciudad, la cota sería ocupada por las fuerzas gubernamentales. En ese momento, en la vertiente que da vista al casco histórico se abrirían algunas trincheras por las fuerzas que habían ocupado el Mansueto, permaneciendo en calma este sector hasta el final de la batalla, cuando se había encomendado la defensa de Teruel a la 46 División, mandada por Valentín González “El Campesino”.

La ruptura del frente del Alfambra por la 13 División el día 17 de febrero y su rápido avance hasta la carretera de Corbalán, daría paso a la toma de Valdecebro por la 84 División dos días después, prosiguiendo el avance hasta enlazar con la 81 División, que había progresado desde la Muela para cortar la carretera de Valencia. Teruel quedaba cercada una vez más, sólo que ahora los defensores eran los combatientes republicanos.

La caída de Santa Bárbara y una parte del Mansueto obliga al general Rojo a tomar alguna iniciativa que paralice la ofensiva del Ejército sublevado, tomando la decisión de atacar estas posiciones con la 11 División, mientras otras unidades deberían recuperar las alturas de la carretera de Corbalán. A pesar de estas directivas, ni el Jefe del V Cuerpo de Ejército, Modesto, ni el de la 11 División, Líster, harían nada por socorrer a la 46 División, cercada en el interior de la ciudad. Para entonces, soldados de la 1ª División ya han ocupado el Cementerio y el barrio de San Nicolás.

El día 20, tras un fuerte bombardeo, las fuerzas de la 101 Brigada que defendían la altura imponente del Mansueto son hechas prisioneras.