VIB-10.1 LOS YESARES – VILLALBA BAJA
La posición de Los Yesares está formada por una línea de trincheras, prácticamente enterradas, que discurre desde el otro lado del camino que lleva a Corbalán hasta la cota 1.096, más próxima al río. Estas cotas, disputadas durante la ofensiva del Alfambra, sirvieron de cabeza de puente para la fase final de la batalla, desde donde partiría la 13 División para escalar las alturas que llevan a la carretera de Cantavieja.
El deterioro de la línea viene marcada por la limitada actuación que tuvo este escenario en el contexto de la batalla, lo que hizo que las fortificaciones fueran muy precarias, y por la pobreza del terreno, fácilmente erosionable por la acción de los elementos naturales.
No obstante, la visita a este lugar resulta imprescindible para la comprensión de este hecho puntual en el devenir de la batalla. Para ello, cualquier punto de estas alturas es válido, aunque merece el esfuerzo ascender hasta la cota máxima, en la que también se conservan algunas posiciones defensivas.
Más información
En el verano de 1936 el avance de la Columna Torres-Benedito hasta los últimos pueblos del curso inferior del Alfambra, Villalba Baja y Tortajada, marcaría el punto máximo de penetración de las fuerzas republicanas, quedando a las puertas de la ciudad.
Villalba Baja sería un punto importante en la inmediata retaguardia, puesto que allí se establecerían servicios esenciales para el funcionamiento del Ejército y se concentrarían numerosas fuerzas para apoyar el ataque sobre la capital.
El 5 de febrero de 1938, en el conjunto de operaciones conocidos como la batalla del Alfambra, el Cuerpo de Ejército de Galicia debía avanzar con cuatro divisiones desde Villarquemado hasta La Losilla. La progresión de la 84 División sobre el vértice Calorina, Corral Blanco y Pico Pichón, tras una fuerte preparación artillera, hará posible que la 13 División se descuelgue desde La Losilla hasta Villalba Baja a cubierto del posible fuego procedente de aquella posiciones.
En el curso de esta operación, el Cuerpo de Ejército Marroquí establecerá una cabeza de puente frente a Perales, mientras que el Cuerpo de Ejército de Galicia hará otro tanto frente a las localidades de Alfambra y Villalba Baja.
El día 5, la 13 División había ocupado las Lomas de Casares y La Losilla, causando un grave quebranto a las fuerzas de la 59 Brigada Mixta que defendían aquel sector. Tomada la parte alta, los soldados de la División de Barrón habían descendido hacia el valle, ocupando la Ermita de Santa Quiteria y Cabezo Agudo, desde donde se aventurarían los combatientes de la 4ª Bandera de la Legión que habían tomado aquellas alturas para adentrarse en Villalba Baja.
Allí se apoderaría del pueblo imponiéndose a la escasa guarnición que lo defendía, cogiendo numerosos prisioneros y abundante material.
Apenas tomado el casco urbano y preservado el puente que cruza el río de una posible voladura, en las primeras horas del día 9 de febrero dos compañías de legionarios ascenderían por la ladera de la cota máxima a la espera de que, al amanecer, se produjera la preparación artillera.
Al fuego de los cañones situados al otro lado del cauce, seguiría el asalto de los legionarios, que tras un duro enfrentamiento en el que sufrieron un treinta por ciento de bajas acabarían tomando aquellas alturas.
Las lomas de Los Yesares sería un punto destacado para el asalto de la 13 División en la ofensiva del 17 de febrero, ya que durante el tiempo de espera se instalarían numerosas armas automáticas y piezas de mortero para cubrir el avance de la infantería.
De este modo, los combatientes de la 13 División se aproximarían a las líneas republicanas durante la noche, a la espera de que el copioso fuego procedente desde la cabeza de puente despejara el camino.
Cómo llegar
Ruta Descargable – Punto de partida Dinópolis